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19-Recordando

4:00 de la tarde.

Desde las sombras, y con un extraño aparato semejante a un tipo de radar y compuesto por cinco ranuras numéricas y un botón rojo, un sujeto anónimo ve cómo su compañero permanece inmóvil, y luego le sigue el rastro a su otro compañero, quien se encuentra con un grupo de "escorias" en dirección hacia el norte de la ciudad.

-¡Mierda, esas ratas inmundas han derrotado a Glacius! ¡Se han librado de él y de Fuunra! ¿¡Cómo pudieron hacerlo si son tan sólo unos engendros!?- se dice el tipo, enojado.

-Vortaxio...cierra la boca. Toma la radio y dile a Glacius de reunirse con Fuunra y Finem. - le ordena otro hombre, de manera calmada pero intimidante, que no parece preocuparse tanto por lo que ocurre.

-Sí señor...

Cogiendo de su bolsillo una radio, el sujeto comienza a anotar la frecuencia 0273 con cada uno de los 4 botones de la parte posterior, y procede a llamar a esa frecuencia:

-¡Glacius! ¡Glacius! ¿¡Sigues ahí!?

Escuchando el mensaje en su propia radio, un dolorido Lobo Gélido recupera rápidamente la consciencia y atiende:

-Ha huido... El Zorro acosador ha huido con Railo y la chica, junto a otras dos mujeres y el chico que le dio una paliza a Fuunra...

-¡Ya lo sé! ¡Estoy siguiendo a Railo con el rastreador!

-Tienes que saber esto. - comenta mientras se levanta - Él tiene amnesia. Ellos le han hecho algo...

-¡No, imbécil! ¿Qué no te lo ha dicho Fuunra? ¡Luego de coger "aquello" del casino, ha visto cómo el lugar estalló en llamas, y cómo Railo fue arrastrado por la fuerza de la explosión, golpeándose la cabeza contra un poste de luz!

-¿Qué? Ese payaso no me ha dicho eso...

-¡O quizás tú cortaste la transmisión antes de que él terminara de decírtelo!

-... ¿Por dónde van ahora, Vortaxio?

-¡Están yendo hacia el norte! ¡Pero no se han ido tan lejos de la fábrica! Comunícate con Fuunra y Finem para reunirte con ellos.

-Bien. - responde Glacius, finalizando la transmisión, quien patea con furia el extintor con el que Zack lo noqueó antes de abandonar la fábrica.

Finalizada la conversación, Vortaxio apaga su radio.

-Ya está, señor...

-De acuerdo. Ahora vamos a por Railo. Su "dispositivo elemental" debe estar ayudándolo a librarse de su amnesia ahora mismo... - estima el misterioso sujeto.

15 minutos después, estando lejos de la fábrica, el grupo se detiene momentáneamente, intentando calmar a un amnésico Railo que sufre de unos repentinos dolores de cabeza que cada vez son más molestos y dolorosos.

-¡AAAAAHHHHHHHH! ¡ME DUELEEEEEEE!

-¡Ray, cálmate! ¡Ya se te pasará! - le pide Zack con preocupación. ¡Oigan todos! ¿A donde podemos ir?

-Yo conozco un lugar...que no es la comisaría ni nada relacionado a la policía - contesta Fred - pero está algo lejos de donde estamos.

-¡Pues vamos allí! ¡Cualquier lugar es mejor! ¡Los Fragmentos de Omega están buscándonos como si fuéramos ratones!

-Oigan, oigan ¿Ella tiene que venir con nosotros? - pregunta por Lara un nervioso Soleyu - Gracias por salvarme de la calle, cualquiera sea la razón, pero vete a tu casa.

-¿Donde es que vives, Lara? - le pregunta Syrinne.

Buscando desde donde se encuentra ver su hogar, lo halla, y le señala al grupo la torre de una de las iglesias de la ciudad, donde mora la campana que suena cada vez que hay misas.

-¿Vives en el campanario de esa iglesia? Quizás querrás decir en la iglesia misma. Deben de tener camas para los indigentes, ¿no es así?

Lara niega esto, moviendo la cabeza negativamente hacia abajo, sorprendiéndola. Al principio nadie se cree que ella viva allí, pero dada la situación no se molestan en debatir si creerle o no, pues deben moverse para evitar ser encontrados por los Fragmentos de Omega.

-Bueno, ¡pues vuelve a tu hogar! ¡Vuelve con tu familia! - le responde Soleyu.

Al escuchar la palabra "familia", la mujer descalza se queda quieta, mirando hacia abajo. Dicha palabra le afecta más que el hecho de ser perseguida por los Fragmentos de Omega, como si le reviviera un recuerdo doloroso del pasado.
La verdad es, que ella está sola en el mundo, y además, está recordando el momento en el que su padre la trajo a esta ciudad cuando era una pequeña niña, donde en el mismo momento la abandonó, dejando nada más que una chaqueta de grandes proporciones, que es la que está usando actualmente con la capucha puesta. Extrañamente, cuando hay sol... Mientras recuerda, ella expresa una leve tristeza en su rostro ante todos, sobre todo a Soleyu, a quien parece reconocer de alguna forma.

-Lara, ¿ocurre algo? - le pregunta Syrinne.

-Creo que no tiene familia... o dijiste algo que no es de su agrado - le dice Zack a Soleyu, quien se queda callado, sin saber qué decir.

-Familia... - comenta un amnésico Railo para sorpresa del muchacho - Fa...Mi... AAHHHHHHHHHHHHHHHH! - vuelve a gritar.

-¡Maldición! ¿¡Que es lo que te ocurre, Ray!?

-¡MI CABEZA, ME DUELE!

-¿Van a permitirme noquearlo si bien no lo puedo matar? - pide el corredor, molesto por su sufrimiento - Desde que ha visto la "amatista" de ...ehmm... - mira a Syrinne - ...de "ella", ¡ha empezado a gritar!

Al escucharlo, Syrinne mira a Soleyu enfadada, y con algo de desconfianza.

-Tienes razón... - le dice la oficial - Nada más ver la piedra de SYRINNE, que es idéntica en forma con la que lleva encima, ha empezado a gritar... Lo mismo cuando Glacius ha venido a por nosotros. Y ahora, cuando mencionaste la palabra "familia", debe de estar recuperando la memoria...

-¿En serio? - exclama preocupado Zack, dando un paso hacia el frente mientras sujeta al Cuervo - ¡Pues vámonos! ¡Lara, gracias por acompañarnos, pero vuelve a tu hogar! ¡Debes de ser una buena persona, pero estarás en peligro con nosotros!

Con prisa, el muchacho intenta liderar a todos los presentes para seguir adelante. Pero de repente, en ese mismo momento, ante la atónita mirada del grupo, una especie de esfera negra como la obsidiana se aparece desde detrás, ocasionando una explosión que derrumba parte de las paredes del callejón donde se encuentran, y cuya fuerza de impacto tira al suelo a todos.

-¡MIERDA!

-¡JAJAJAJAJA! ¿No esperaban esa bomba, verdad? - les dice, en un tono arrogante, el misterioso Fragmento de Omega que hace presencia.

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